Caminando de tarde.

A pesar de que ya estaba oscureciendo, no tenia nada que hacer, por lo que me convenci a mi misma de dar un paseo.
Caminaba por la calle despreocupada, aunque siempre alerta.
Cada tanto me paraba a observar vidrieras como cualquier chica haria. Pero sabia que cualquier cosa podria pasar en cualquier momento...

Schatten surgió de una de las sombras de un callejón cercano. Acababa de llegar a la ciudad, y ya estaba empapándose de la perversión del lugar. Suspiró aliviado. Quizás no sería tan malo marcharse de Alemania después de todo. Miró a su alrededor envuelto en su negra capa, y su mirada se detuvo en una lujosa joyería. En ese momento vio sus dedos desnudos, a pesar de los guantes. Hacía mucho que no llevaba anillos.

Schatten, la sombra, entró en la joyería, lanzándole una gélida mirada a la joven recepcionista. Pidió un par de anillos, uno de ellos con un brillante rubí engarzado. Se lo colocó por encima del guante y miró su mano críticamente. Después dio media vuelta y salió de la tienda.

-¡Eh, espera!- le dijo uno de los fornidos guardias.

Schatten, sin volverse sacó un brillante revólver del bolsillo, y le pegó un tiro en las tripas al desgraciado. La alarma empezó a sonar, pero el siguió caminando, impasible, en busca de una sombra.

A lo lejos pude escucachar una alarma de tienda, rapidamente se comenzo a escuchar gran disturbio, por lo que me quede quieta intentando prestar atencion a todo el bullicio.
Al notar que habia personas metidas y que no solo se trataba de la alarma de un auto, me meti a un callejon, donde hice uso de mi poder para subir al techo del edificio mas cercano, Por arriba de estos buscaba el lugar de donde provenia el ruido, y al encontrar el lugar, baje de un salto.
Me asome a la vidriera, la cual estaba rota, y era predecible, ya que era una joyeria.
Me escabulli dentro del lugar, si algo llegase a salir mal, seria muy facil hacerme pasar por rehen o victima, no tenia nada que perder.

Me senti un tanto perturbada al escuchar un disparo a lo lejos. Era dentro del local sin duda alguna, pero, sin embargo quien fuese, debia salir...por donde entro y yo me encontraba en el camino.
Apure mi paso, dejando la sigilosidad de lado para asi buscar a quien fuese el encargado de tal mal momento. Aun por la sombra, haciendose casi invisible a su sigilosidad, observo de lejos a un hombre anciano...

Escuche por telepatia qe Ash me avisaba que algo malo pasaba, sali del trabajo rapido, y fui a dodne provenia su llamado, llegue a un callejon oscuro, una campana sonaba, alli la vi sola, con su traje muy sexy
-Hola amor, que paso ?-

Cariño...Esto...no esta bien.

Mire a mi al rededor de forma preocupada, y dirigi mi mirada hacia el anciano, quien no parecia nada indefenso.

Que haremos con el...?.

-Ya veremos bebe-
cree una pequeña corriente de agua, la cual la situe al rededor del anciano, creando un aro de agua a su al rededor, giraba a una velocidad increible, cualquiera que pasara por ahi se cortaria

Schatten se detuvo en seco cuando una corriente de agua surgida de la nada le rodeó y comenzó a girar con fuerza a su alrededor. Resopló, hastiado, puesto que esperaba que su llegada al nuevo continente fuera más tranquila. Miró despectivamente hacia el agua de su alrededor, y alargo una mano hasta tocar el agua, momento en el cual retiró la mano rápidamente, con el guante roto y la yema del dedo herida.

Frunció el ceño, observando como comenzaban a llegar guardias de seguridad, y sintió una sensación de frustración al no poder actuar. En ese momento se dió cuenta de que el agua, al girar tan rápidamente a su alrededor, refractaba la luz hacia muchas direcciones, creando retazos de sombra que él aprovechó para salir de allí, reapareciendo a la sombra de unos edificios cercanos.

Se volvió invisible rápidamente y aguardó, esperando ver a la persona que le había lanzado la corriente de agua.

Umm...esto va de mal en peor...sigamoslo.

Afirme, al ver que el anciano con gran agilidez se escapaba por una sombra cercana.
Me resulto raro no haberlo visto antes, pero en fin, alli estaba. Algo habia que hacerse.
Tome a Fracen de la mano, y comenze a seguir el rastro por donde habia entrado, para que nadie nos viese.

Vi como el villano se fundia entre las sombras
-Tiene poderes, se confunde con la sombra-
le explique a Lullaby, cree unas columnas de fuego que hizieron luz y reflejaron su escondite
-Asi que eres tu, Schatten-
lo reonoci en seguida, ya habia causado problemas en otros continentes

Le conoces?

Pregunte curiosa, nunca antes le habia visto, por lo menos no aqui. Si lo conocia de otro lado, que hacia en New York...?Algo no andaba bien, algo mas estaba detras de este simple robo a la joyeria.

-Si lo conosco-
me quede pensando que haria aqui y lo mire de lejos
-Lo que me pregunto es... que hace aqui en New York ?-
tome la mano de Lullaby

No vale la pena quedarnos aqui y arriesgarnos...si huye no habra heridos. Mejor vamonos, y averguemos un poco mas para saber que hace aqui.

Mire a Francen un tanto preocupada, las joyas eran lo de menos. El anciano estaba dispuesto a escapar, mejor era dejarle ir en ese momento, y avergiuar mas de el, que hacia aqui y que quiere.

-Tienes razon-
una pequeña ira recorrio mi cuerpo, queria atraparlo y dejarlo ir no me gustaba, hize desaparecer los pilares de fuego, por lo que deje de ver a schatten y volvi a tomar la mano de Ash
-Vamos amor...-

Schatten se dió la vuelta bruscamente cuando varios pilares de fuego surgieron de la nada. Miró despectivamente a su alrededor, pero sin alcanzar a ver a sus perseguidores. Al rato, las extrañas columnas desaparecieron, pero el se mantuvo invisible unos minutos más, esperando ver a sus atacantes, pero nadie apareció, por lo que se retrajo más aún entre las sombras, desapareciendo al instante.